martes, 21 de octubre de 2014

Dientes perfectos

Las Pretty Woman me miraban con cara de flipe en plan mala mujé que callado te lo tenías. Y yo les ponía caretos de no sé quien ye este rapacín tan llargu.

El tío güeno me dice que se va a pedir y que viene ahora, momento en el que aprovecharon las Pretty Woman para interrogarme en qué momento me habían dejado sola para conocer al macizo....y yo que ni pajolera, que no lo había visto en mi vida.....pero tenía que conocerme porque se le veía muy suelto y me llamaba por el nombre. ¡Qué Como tener los Dientes perfectos!

Cuando vuelve yo le seguía el rollo porque me daba palo quitarle la ilusión al chiquillo diciéndole que no tenía ni pajolera de quien era. Hasta que por el contexto de la conversación saco que es el inglés que tenía sentado al lado la noche anterior y que entre la Happy Hour y el contraluz no llegué a ver bien.



ABREVIO: Fue mi noviete (ojo, que me duró meses, no sólo el veraneo....ehhhhh) o como queramos llamarlo ante el pasmo de las Pretty Dientes perfectos que mucho enseñar carnaza pero no se comieron un rosco (es que daba miedo Enlace)

Cómo me enrollo.....a lo que iba...que ya estoy en la 3ª Edad y se me va más la olla que a las Chicas de Oro.

Bueno, pues a que todos tenemos especialidades para el ligoteo con guiris e igual que los españoles no me dicen ahí te caigas muerta, bonita, con los ingleses (debe de ser el efecto del alcohol) sí que me hacen bastante caso....y este dato está científicamente comprobado incluso in situ.

¡Ah! Mientras que las pasmadas de las Pretty Woman intentaba ligotear con los pastilleros servidora no se preocupó más de sus pintas y zapatillas porque no pisaba las discotecas, ¡qué vivan las Happy Hours, los baretos de ingleses que te dejan entrar con las pintas que quieras y el botellón en la playa!

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