lunes, 8 de septiembre de 2014

El fin de semana


El fin de semana se suponía que iba a estar entretenido y así fue , por lo menos para mí . A cenar con mi niña radikal y el nene ( su nene ) , alguien a quien conocí hace mas de un año y que me cae de p.m , lo poco que conozco de él , aunque no es tan desconocido para las personas como intenta hacerse ( tiene mucho por dentro ). En definitiva, el volver a saludar una sonrisa y el abrazar a la nena igualmente. Nos vamos a cenar, después de esperar casi una hora ( si es que el bareto esta genial, pero joder lo que tardan coñe ) , después de aguantar un grito directamente en mi oreja ( del cual poco mas y me quedo sorda ), sonriendo a todo lo que esta por venir ( o se supone que pasaría después en la juerga ). Miles de risas en la cena, una expresión la cara de mi niña radikal ( una imagen vale más que mil palabras ) y para imagen la de el, esas miradas buscando las suyas y yo embelesada viéndoles ( envidia sana, se llama ). Cuando ves que entre dos amigos empieza a surgir algo bonito y lo están empezando a vivir, verdaderamente precioso.

Nos ponemos en marcha para el dichoso garito , yo que N.P.I ( ni puta idea ) del camino para ir, no me acuerdo de la anterior vez que fuimos y las risas , pensando si tendremos la misma suerte de según lleguemos al sitio, abría un aparcamiento en la misma puerta del garito esperándonos. ( Pues sí lo había ). Entramos en el garito y apenas había empezado a llegar toda la gente que se suponía que nos íbamos a juntarnos. Y eso que llegamos algo después de la hora a la que habíamos kedado. Ambientazo , sonrisas, caras y a pedir a la barra, que es lo mejor. La Noche ... rara... pero estuve con la gente que quería estar , así que tampoco estuvo mal del todo.

Es impresionante el frío que hacia, joder . Se helaba tó , así que después de salir de ese garito bien entrada la madrugada, nos dispusimos a irnos a otro sitio , nos fuimos y por el camino la gente se empezó a perder. Así que, como hacia frío y el cansancio ya hacia mella en nuestros cuerpos, optamos por la vuelta a casa .

Ese makinón conducido por esa peaso de condustora, er peaso de copí , partiéndose por las ‘’pirulas’’ que hacia dicha conductora y yo, testigo directo de estos y de sus comentarios , sonrisa en la cara y partiéndome también . Llegada a casa, con el frío que hacia, me caliento un vaso de leche y me pongo el pijama, me siento en el sillón y espero a que me de un toque, pa saber que la vuelta no ha sucedido nada. Llamada perdida. Término mi vaso de leche y Luna ( mi perrita ) que de un salto se sube a mi regazo, me quedo dormida y a la media hora me despierto, sigo en el sillón y Luna sigue en mis brazos, la dejo a ella en el sillón y me voy a dormir.

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